“1.5° para salvar al planeta” busca llegar a las generaciones jóvenes e inspirar un cambio a través de una consciencia positiva
“Reactivar la consciencia de la problemática ambiental que encaramos” es la manera en que Iván Carrillo, periodista ambiental y panelista en “1.5° para salvar al planeta”, describió la intención detrás de la serie documental. En celebración por el Día Mundial de los Océanos, 1.5° se presentó en el Teatro José Flores Valdés en el Museo Universum, en la CDMX, en donde después de proyectar un minidocumental sobre las islas mexicanas, el público tuvo oportunidad de escuchar la conversación de investigadores expertos en las ciencias del mar.
Dentro de los panelistas asistieron el Dr. Octavio Aburto, del Instituto Scripps de Oceanografía y explorador de National Geographic, el Dr. Pablo Hernández Alcántara, del Laboratorio de Ecología y Biodiversidad de Invertebrados Marinos de la UNAM; la Dra. Norma Angélica Corado Nava, de la dirección General de Divulgación de la Ciencia en el Museo Universum; y la Dra. María Guadalupe Ponce Vélez, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM.
La conversación se abrió con el recordatorio de que México se sumó el pasado diciembre del 2022 a la llamada Agenda 30×30, un esfuerzo mundial por proteger al 30% de los ecosistemas terrestres y marinos del planeta para el 2030. El Dr. Octavio Aburto señaló que “en 2020 teníamos la meta de proteger 10% de los océanos, y no lo logramos. Ahorita tenemos 3% en promedio, así como en Cabo Pulmo y en Revillagigedo”. Los ecosistemas del mundo necesitan protección urgente; según cifras dadas por el Dr. Pablo Hernández durante el panel, en el mar se calcula que existen 1.4 millones de especies, sin embargo, existen proyecciones que calculan una tasa de extinción de alrededor de 25 mil especies anualmente, la mayoría de las cuales ni siquiera conocemos antes de su pérdida.
Muchos son los factores que influyen en la pérdida de especies y eventualmente la pérdida de ecosistemas: desde la contaminación hasta actividades económicas no sustentables, los expertos del panel de 1.5° para salvar al planeta compartieron cifras y datos importantes para tomar consciencia de la magnitud de nuestro impacto. La contaminación plástica fue el foco del Día Mundial del Medio Ambiente este 2023; sobre esto, la Dra. María Ponce afirma que la problemática en particular de los microplásticos en el mar es problema no solo para las especies marinas, si no para todos en el mundo, sin importar qué tan lejos de la costa se encuentren. “Los microplásticos son ahora vectores sintéticos, que a lo largo de su camino van adquiriendo una gama de contaminantes de tipo químico que tienen una peligrosidad aditiva” comentó la Dra. Ponce. Se han encontrado microplásticos en alimentos del mar, pero también en otros productos como sal, agua de la llave, e incluso agua embotellada. La Dra. Ponce llamó a este efecto el “efecto boomerang”: “Generamos los plásticos en el continente y los arrojamos al mar, pero se regresan a nosotros de alguna forma”.
Otra gran problemática es la pesca industrial: una de las actividades más destructivas para el mar. De acuerdo con el Dr. Pablo Hernández, hasta el 80% de lo que se pesca en buques se deshecha en algunos países, pues es pesca incidental o de compañía. Por muchos años el gobierno mexicano se ha resistido a establecer medidas de protección más estrictas sobre actividades extractivas en el mar, bajo la suposición de que el sector industrial pesquero se vería gravemente afectado. Este 2023, la ciencia ya ha dado una respuesta a esta suposición: Revillagigedo ha sido una Reserva Marina desde el año 2017 con limitadas actividades extractivas, y con ello ha demostrado que no solo no se reduce el volumen de pesca, si no que podría incrementar. Las poblaciones de atún y de tiburones han crecido en tan solo 5 años. Esto es una excelente noticia, pues nos informa que en muchos lugares aún hay tiempo para actuar. “El contexto es positivo, yo siempre he dicho que hay que estar positivos. Pero nos vamos moviendo lentos; hay que apresurarnos” afirma el Dr. Octavio, miembro del grupo de investigadores que publicó el artículo que describe el impacto positivo de Revillagigedo.
A demás, México con sus 3 millones de kilómetros cuadrados de territorio marino, ofrece un paraíso para quienes practican buceo. La Dra. Norma Angélica, buza experta, afirma que el buceo es una herramienta clave para generar la consciencia que se requiere para impulsar la protección de los mares. A demás, es una actividad económica que genera una derrama equiparable a la pesca industrial en México; informa el Dr. Aburto que el buceo generaba “725 millones de dólares al año antes de la pandemia. Y el comparativo es; toda la pesca en México, la industrial y la artesanal, genera casi 600 millones al año.”
Se tienen todas las herramientas y evidencias científicas que podrían impulsar a México a ser un ejemplo global de cómo recuperar y proteger los mares. En 2020 se tenía la meta de proteger 10% de los mares del mundo bajo el esquema de una reserva marina, pero actualmente en todo el mundo se protege aproximadamente 3% del mar. En ese año no se logró la meta, pero tenemos aún oportunidad de trabajar por llegar a ese 30% que podría marcar la diferencia para la adaptación de cientos de especies, incluido el humano.
El evento por el Día de los Océanos cerró con el mensaje alentador del Dr. Aburto: “Si todos nos sumamos sí podemos lograr la meta. Tenemos que pensar en un futuro colectivo, poner la responsabilidad en nosotros, porque ahora si no podemos fallar en la meta”.
Aurora Pimentel Tovar / Mares Mexicanos