La CDMX es la entidad federativa con mayor cumplimiento de políticas climáticas en México
En el contexto de América Latina, México ha sido un ejemplo a seguir en políticas climáticas. Se cuenta con una Ley General de Cambio Climático a nivel nacional, la cual dicta que cada entidad federativa deberá diseñar e implementar sus propios elementos regulativos.
“Deben de tener programas estatales, estrategias, un atlas de riesgo; deben de tener una ley propia de Cambio Climático, su reglamento y comisiones, consejos, fondos para el cambio climático y convenios para generar acciones para estrategias de mitigación y de adaptación ante efectos de cambio climático” informa la Dra. Magdalena Lagunas, Investigadora CONACYT.
El cumplimiento de la política de Cambio Climático significaría contar con todos los elementos que dicta la ley. Lamentablemente, de las 32 entidades federativas, únicamente la Ciudad de México cuenta con 100% de las estipulaciones de la Ley General de Cambio Climático.
“Los lugares más vulnerables del país son los que cuentan con menos instrumentos legales. El Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) indica los municipios más vulnerables ante el cambio climático en el país; son alrededor de 400, la gran mayoría en el sureste del país y en estados costeros” advierte la Dra. Lagunas.
De acuerdo con su estudio realizado en 2020, la Dra. Lagunas informa que tenemos 7 estados con un nivel muy bajo de cumplimiento, entre los que se encuentran Nayarit, Sinaloa, Guerrero y Tabasco. Para entender por qué estos estados, que son ya vulnerables a los efectos del cambio climático, presentan esta deficiencia, es importante considerar los aspectos socioeconómicos y políticos que atraviesan las entidades. Por ejemplo, la falta de seguimiento con cada cambio de gobierno.
“Que un estado no cuente con su ley no significa que es porque no ha querido hacerlo, sino por las condiciones políticas y sociales. Los gobiernos priorizan sus intereses, que se dirigen hacia lo que les genera más economía y poder político” afirma Lagunas.
Aunque discursivamente México aparenta ser líder en materia de política climática, carecemos de datos congruentes que demuestren que estamos reduciendo nuestras emisiones de gases de efecto invernadero, y esta falta de información se debe en parte a la carencia de evaluaciones de los instrumentos de mitigación y adaptación al cambio climático.
“La Ley Nacional mandata a las entidades federativas y a los municipios que tengan sus evaluaciones ante la política climática. Sin embargo, ninguna entidad hasta donde nosotros nos quedamos con el análisis tiene estrategias de evaluación de sus instrumentos, ni siquiera la CDMX” comenta la Dra. Lagunas.
Al ser México un país megadiverso, podríamos aprovechar el recurso natural como una estrategia de mitigación del cambio climático.
“México habla de conservar a lo mejor hectáreas de bosque o hectáreas de manglar para que estos ecosistemas funcionen como sumideros de carbono y que de alguna manera entonces se le pague a México por esta acción. Podríamos fácilmente ser un país líder” afirma Lagunas. Esto visibiliza la importancia de conservar nuestros ecosistemas en el presente contexto climático. A demás, México cuenta con una enorme diversidad cultural; somos un país con todavía muchas comunidades que no solo viven cercanamente con la naturaleza, si no que han sabido conservarla y manejarla por cientos de años.
“Las culturas de estos pueblos originarios precisamente tienen súper interiorizado un respeto por la naturaleza y tienen unas formas de convivencia muy armoniosas. Los defensores de la naturaleza son en general líderes de pueblos originarios” comenta Lagunas.
Finaliza al señalar que “la conservación de la naturaleza es una estrategia que podría aprovecharse más en México, y que verdaderamente nos situaría como líderes ambientales, con acciones evidentes y no solo con discursos legales”.